Cuando Ruyman nos llama, lo primero que hicimos fue desplazarnos al Puerto para conocer el local comercial in situ y ver sus peculiaridades. Conocimos el espacio en obras. La ubicación era excelente, pues estaba dentro de un punto estratégico en el centro urbano y en una zona comercial de mucho tráfico turístico.

Nuestra aportación en este proyecto, «Pastelería Abuela Mercedes», fue desarrollar diferentes soportes corporativos partiendo del escaparate y fachada de la nueva pastelería, así como del diseño de murales en las paredes interiores, iluminación y soportes en papel como flyers comerciales y la carta.

Nos sumergimos en el proyecto trasladándonos a 1865, a ese aire frío y cortante de las dos de la madrugada en la calle el Sol de los Realejos, donde la abuela Mercedes y su hija comenzaban el día cada madrugada. Queríamos que en cada uno de los soportes que diseñáramos se viera reflejada esa familia llena de sentimientos y compromiso por seguir manteniendo esa tradición familiar.

La fachada era uno de los soportes clave a la hora de producir y diseñar. El rojo y dorado eran dos de los nuevos colores corporativos que sin duda queríamos que fueran los protagonistas para dar visibilidad al negocio.

Elegimos forrar todas las paredes de la fachada de la Pastelería Abuela Mercedes con materiales resistentes como el aluminio y lacarlo de color rojo. Planteamos un diseño que produciríamos en vinilo de corte, con un estilo tradicional y moderno, esa sería su nueva seña de identidad. Una cautivadora mezcla que se llevaría a cabo también en todos los conceptos que desarrollamos y utilizaríamos para vinilar el ventanal con iconos y textos descriptivos de todo lo que ofrecería la nueva cafetería-pastelería.

En el interior del espacio, teníamos un pequeño mostrador y una pared que decidimos empapelar con un espectacular papel italiano con textura roja con unos círculos dorados que estéticamente potenciaban la imagen de marca.

Teníamos dos paredes blancas donde elegimos  situar como punto estratégico el logotipo  y también como punto donde instalar con letras en vinilo de corte conceptos y claims que servirían tanto de decoración como de medio publicitario para darle uso semanalmente.

Ruymán nos pidió también que nos encargáramos de la iluminación del local, así que elegimos 3 bonitas lámparas en madera de nogal que ubicamos en el techo colgadas sobre el mostrador.

Mientras trabajábamos en la estética del local comercial, teníamos que ir avanzando en todo el diseño de los soportes en papel, como los flyers promocionales para la apertura y el diseño de la carta. Creamos una línea con personalidad, tendencia y tradición, claves para la Pastelería Abuela Mercedes. Utilizando paletas de colores en rojo y dorados sobre fondos blancos y minimalistas.

La carta es un díptico donde predominan iconos que identifican cada uno de los productos para que la legibilidad sea más accesible y 100% visible. Además, realizamos unos delantales artesanales eligiendo una tela roja del mismo color que el logotipo, donde bordamos el logotipo a gran tamaño y le dimos un acabado especial en 3D como símbolo de modernidad.

La inauguración era un día muy especial, había mucha expectación. Por eso, fabricamos y diseñamos su propio  photocall: “muéstranos tu sonrisa más dulce” para poder recordar este día tan especial y hacer promociones especiales creando un hastag al escribir el mensaje.

Diseñamos también un Flyer exclusivo para repartir el día de la inauguración con un plano para que todo el mundo estuviera informado del evento y situación de la nueva pastelería.