Mucho más que un producto…contar una historia: Estrategia de Marca
Seguimos hablando de conceptos, de marcas, pero en este caso vamos un pasito más allá. Algo que a veces se pasa de largo y es esencial para el éxito a largo plazo: la estrategia de marca.
Muchos clientes nos llaman o escriben para que les ayudemos a redefinir su marca, hacer un rebranding, un nuevo logotipo, dar otro enfoque a su empresa o proyectos…” un lavadito de imagen”, centrándose únicamente en la imagen y en lo gráfico y visual de su marca…. Y se olvidan de algo esencial, que es pensar en una marca como algo más que un producto o una “cara bonita” ….
Pero deberíamos empezar por preguntarnos ¿qué define realmente tu marca? Una marca va mucho más allá, es contar una historia, es entender, es conectar, es ver y actuar hacia el USUARIO, y no quedarnos solo en lo superficial.
Para ello, centrarnos en la estrategia de la marca es una de las claves para tener relaciones emocionales a largo plazo, entender la personalidad de la marca, sus objetivos, sus clientes y relaciones, en definitiva…su historia y todo lo que la rodea.
Por dónde empezar….
Empieza definiendo tu marca y hazte las siguientes preguntas:
- ¿Por qué comenzaste este proyecto?
- ¿Cuál es el objetivo de tu marca?
- ¿Quiénes son tus clientes, a quién se dirige tu producto o servicio?
Todo esto nos ayudará a entender mejor quienes somos, tener un punto de partida y centrarnos en el producto, la experiencia y la percepción que tiene el usuario sobre nuestra marca.
¿Qué es una estrategia de marca?
Hablamos de estrategia de marca cuando analizamos todos aquellos elementos que la representan, su personalidad, las promesas que hace a sus clientes, y todo lo que podríamos hacer mejor de lo que hacemos.
Una marca tiene una parte de esencia, cuando nos preguntamos por qué existe, por qué es relevante y otra parte de datos, más numérica, más tangible. Lo importante es pensar en las marcas más como personas y no como productos y servicios. Debemos pensar en las emociones y la experiencia, y para ello tiene que haber un punto de partida y un camino a donde queremos llegar para que podamos contar una historia y conectar con nuestro público objetivo.
Define tu marca y sus objetivos:
- ¿Cuál es el problema que estás resolviendo o buscas resolver con este producto o servicio?
- ¿Quién es mi cliente?¿Qué le gusta, qué no, qué lugares frecuenta, qué relaciones tiene?
- ¿Quién es mi competencia directa e indirecta?¿qué lenguaje gráfico y verbal utiliza?
- Si les preguntamos a nuestros clientes por qué decidieron comprar mi marca ¿Qué les harían sentir?
- Si mi marca fuera una persona, ¿cómo sería su personalidad?
Cuando hayas respondido a estas preguntas, piensa también en los elementos visuales como los colores, el tipo de letra, el logotipo, el eslogan y otros elementos de comunicación y marketing que ayuden a posicionar tu marca.
Una vez tengamos claro estos puntos, debemos centrarnos en la planificación de la estrategia de marca. Para ello pasaremos a la acción con una serie de pautas y acciones que tendremos en cuenta a la hora de comercializar y lanzar el producto o servicio a través de diferentes acciones de branding, marketing y publicidad.
Todo proyecto necesita saber dónde está, a dónde quiere llegar y cómo recorrer ese camino. Por eso te recomendamos que siempre antes de comenzar un proyecto, tengas esto en cuenta previamente, pues te ayudará a posicionarte y definir tu marca y crear relaciones a largo plazo con tus clientes.